Con la Revolución Francesa se propuso en la Asamblea un método de ejecución rápida e indolora para todos los condenados a pena de muerte. Aprobada ésta, se confió al doctor Antonio Louis de Guillotine el diseño de un aparato capaz de cumplir con estos requisitos. Los mecánicos alemanes Clairin y Schmidt fueron los encargados de construirlo. Este artefacto era una versión modificada de otra utilizado en Italia en el siglo XVI. Se le llamó louisette. Por primera vez fue utilizada en abril de 1792 contra Nicolás-Jacques Pelletier. Durante el gobierno del terror, la louisette fue renombrada como guillotine (guillotina en francés), imitando el nombre del creador. Terrible final para la persona que buscaba una forma honrosa de morir, inmortalizado en una máquina cuyo destino fue totalmente diferente al que se propuso al inicio. Los personajes más importantes que pasaron por la guillotina fueron sin duda los reyes de Francia Luis XVI y María Antonieta. Desde el comienzo, la ejecución mediante este método se convirtió en un espectáculo popular. La estructura de la guillotina estaba pintada de un color rojo vivo y la cuchilla estaba de un color reluciente, todo esto, en un estrado a lo alto para que toda la plaza no se perdiera del acto. Con la puesta en funciones de la guillotina, circuló un rumor que le dio un matiz dramático a esta herramienta de ajusticiamiento. Algunas personas que tuvieron contacto con las cabezas de los ejecutados comentaban que estas respondían a ciertos estímulos, e incluso una que otra podía hablar, permaneciendo vivas por unos segundos. Nunca pudo saberse con exactitud si estas afirmaciones estaban científicamente comprobadas o no era más que ilusiones, fantasías o una forma de llamar la atención. Para el siglo XIX, las ejecuciones se habían convertido en un asunto de espectáculo nacional. Todas las mañanas la plaza recibía multitudes para ver quien era el siguiente en morir. Para los ejecutados, la muerte por la guillotina ya pasaba a ser una forma épica de morir. Para evitar que la pena capital dejase de ser un acto heroico en lugar de un castigo, se ordenó pintar de color madera bastante oscura los pilares, y de color negro la cuchilla. Así mismo, se quitó la plataforma para que el artefacto se ubicara al ras del suelo. De esta forma la ejecución por la guillotina pasó a ser un acto menos excitante y popular.
En el siglo XX el romanticismo de la guillotina había desaparecido. Dejó de ser un espectáculo que congregaba gran público, y empezaron las primeras manifestaciones contra esta cruel forma de ejecución. Cuando los alemanes tomaron Francia durante la Segunda Guerra Mundial, la guillotina fue utilizada para ajusticiar a los políticos que se oponían al nuevo régimen. Fueron ejecutados 20000 personas, más que en toda la Revolución. La decadencia de este aparato llegó a tales extremos que en sus últimos años sólo se ejecutaban a delincuentes de baja calaña, totalmente diferente a los grandes criminales o gobernantes que hacían daño a Francia. La guillotina dejó de existir en 1977, cuando el gobierno aprobó la ley que prohibía su uso. Había durado 185 años.

Un equipo norteamericano realizó una expedición de un día y medio al sitio, apenas bastante tiempo para realizar la prueba científica. Hicieron un agujero a un lado de la estructura con dinamita y algunas maderas petrificadas fueron reveladas; sin embargo su conclusión fue: "nada de interés arqueológico". Si este objeto fuera El Arca de Noé, tendría aproximadamente 4400 años de antiguedad así que la madera tendría que estar petrificada. Así que encontrar piedras alisadas como la madera seria suficiente evidencia. Sin embargo, debido a que el material no tenía ningún anillo de crecimiento, el equipo decidió que no podría ser de madera. 
Depués de ver un artículo publicado en la revista LIFE que hablaba sobre la expedición, Ron Wyatt un arqueólogo aficionado, visitó el sitio en 1977. Este le llamó poderosamente la atención y decidió que la estructura merecía que se continuara con las investigaciones para saber si podría ser el Arca de Noé. Localizada a 6.300 pies sobre el nivel del mar, estaría demasiado alto para ser los restos de un barco debido a una inundación local. También está a más de 200 millas del mar más cercano. Las dimensiones concuerdan con la descripción bíblica de el arca de Noé descrita en Génesis 6:15, midiendo 300 cubits de largo. La anchura era mayor que la mencionada en la Biblia debido a que los lados del barco se habían colapsado, lo que se entiende en un barco con esta antiguedad.


Todas las expediciones se han hecho al Monte Ararat, pero ¿qué dice la Biblia realmente sobre el lugar de reclinación de la Arca de Noé? Genésis 8:4, "Reposó el Arca en el mes séptimo, a los diecisiete dias del mes, sobre los montes Ararat". La Biblia no dice que el Arca reposó sobre el Monte Ararat, pero sí en la región montañosa de Ararat. Ahí exactamente es donde encontramos este objeto en forma de barco, situado cerca de quince millas al sur de el Monte Ararat. Los nombres de los lugares circunvecinos estan asociados interesantemente a la descripcion bíblica de el diluvio. El valle se llama "El valle de los Ocho", en referencia a los ocho sobrevivientes de el Diluvio. Existe una aldea en el valle donde varias anclas de piedra gigantes pueden ser encontradas a miles de pies sobre el nivel del mar y a cientos de kilómetros del mar más cercano. Sobre las anclas de piedra hay cruces cristianas talladas del período de las cruzadas, evidencia que la gente en la época de las cruzadas también reconocieron el significado cristiano de las anclas de piedras. Hay trece de estas anclas de piedra que todas yacen en línea directa con el barco. Evidentemente, Noé las soltó mientras las aguas descendieron y momentos antes de que el Arca reposara.















